Originalmente estos locales eran una excusa para vender el vino que las familias cultivavan en las laderas de las islas, aunque ahora se ha abierto un poco a otros locales ya no tan estictos.
Los auténticos Guachinches, espero no equivocarme, los lleva la familia de la casa, solo pueden abrir 3 dias a las semana, de jueves a sábado, y la comida es «fija», comienza por unos frutos secos, para seguir con 3 platos, los que haya y únicos.
Todo regado, claro está, con vino de la familia, y no se os ocurra pedir agua, que ponen aquella cara de que el agua es para los patos :)))
Por cierto, el vino es joven y con muchas peculiaridades que mi falta de expertise en la poética vitivinícola no me permiten describir, pero son realmente ricos y especiales.
Y para acabar recordaros que si estáis por las islas descargaros el Guachapp, nombre perfecto y simpático para la aplicación que te guía por los Guachinches canarios y que puedas disfrutar de su comida como mandan los cánones.











